LA FURIA DEL DRAGON

ON…

MPBlog: ‘Cold as you’ – Taylor Swift

Pekin Express cerró anoche su tercera edición. Tras la ruta del Transiberiano y la ruta del Himalaya, el reality-road de Cuatro llegaba en esta ocasión y, tras 45 días de aventura, a Bali después de recorrer cinco países en la conocida como ruta del Dagón: Vietnam, Camboya, Laos, Tailandia y, finalmente, Indonesia.

Trece etapas que discurrieron entre ríos, volcanes, ruinas, zonas de guerra, playas paradisiacas, selvas, urbes agobiantes, poblados flotantes y un sinfín más de parajes espectaculares. Impresionantes pruebas de inmunidad como la recogida de azufre en la cima de un volcán y nuevos retos como la bandera negra, la competición por equipos en ‘hormigas y tarántulas’ o la ‘caza de la presa’ de Sandra y Belinda en una etapa con falsa eliminación hicieron de esta edición algo diferente pero que mantuvo elementos tradicionales como los hándicaps y el intercambio de parejas.

Precisamente fue la pareja de hermanas vascas la que logró alzarse con la victoria final en Bali frente a otra de las parejas más carismáticas de esta edición, Manolo y Marta. Padre e hija lucharon hasta el último instante, haciendo de la gymkhana final una competición igualadísima hasta el último instante.

Los valores de Pekín Express siempre me han fascinado. Por encima de la competición, los conflictos, las alianzas o el afán por acumular amuletos y llegar a la meta antes que nadie, Pekín Express demuestra que existe otra forma de ver la vida y el mundo. Bastan una mochila, un euro al día y una buena compañía para vivir una experiencia inolvidable. Los choques culturales y la hospitalidad de la gente que, aun sin tener nada, lo da todo son gestos que, como poco llaman la atención y, en muchos momentos, invitan a la reflexión. Es justo este el sentimiento que despierta en mí cada temporada de Pekín Express.

Por segundo año, Raquel Sánchez Silva ejerció como directora de carrera, aunque ya suenan rumores de que la fusión entre Telecinco y Cuatro podría cambiar la situación para la próxima edición. Así es como ya han comenzado los procesos de selección para el cuarto Pekin Express y se especula la alternancia entre ediciones anónimas y con famosos, tal y como ha venido haciendo ya la televisión francesa, país del que es originario el formato. Jesús Vázquez que, de momento, volverá a presentar un renovado Allá tú en Cuatro, es un firme candidato a tomar el testigo de Raquel, si bien él podría encargarse de la edición con famosos y ella seguir con la de anónimos. El tiempo dirá…

El caso es que Raquel ha sabido hacer suyo Pekin Express y, aunque muchos la acogimos con escepticismo tras la primera edición presentada por Paula Vázquez, lo cierto es que ahora me cuesta hacerme a la idea de que no vuelva a presentarlo.

Aunque la ruta del dragón ha acumulado una audiencia media inferior a las dos ediciones precedentes, los tres meses durante los cuales ha durado la retransmisión del programa he disfrutado con la trepidante aventura de 20 valientes que buscaban la gloria y se encontraron a sí mismos. Porque eso es Pekín Express, una aventura donde no importa tanto la meta como el camino recorrido.

OFF…

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