martes, 26 de octubre de 2010

JUKEBLOG: SOY YO

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ON…

Hoy no encendemos la televisión…

Hoy encendemos por primera vez la Jukeblog, una versión personal y particular de las clásicas Jukebox. Esta sección, que nace como evolución natural del MPBlog, pretende ir un paso más allá en lo que a reproducción musical se refiere.

Y no, no se tratará de recoger en un mismo saco los artículos musicales del blog. No, la Jukeblog es mucho más que eso. Es aprender a saborear las canciones… lograr que la música y las letras nos digan algo.

Por eso, cualquiera de los lectores o visitantes del blog podéis participar también. Si escucháis alguna canción y os transmite algo especial, no tenéis más que solicitarla a la Jukeblog para observar la transformación que puede experimentar si se escucha con algo más que los oídos, así que… espero vuestras peticiones. 

Y ya no me demoro más… Aprovechando la celebración de los 25 años de carrera musical de Marta Sánchez (probablemente una de las mejores voces nacionales), le pido a la máquina de la música que nos ponga la nueva versión de uno de sus grandes éxitos…

Hoy, en la Jukeblog… ‘Soy yo’.

Dale al play…

Marta Sánchez y Nena Daconte–Soy yo

Aquí estoy, sin mirar atrás, sigo mi vida sin más.

Después de vivir en el centro de la vorágine, me envuelve ahora un ritmo pausado y tranquilo que trata de devolver las aguas a su cauce. Nada queda ya de ese pasado salvo los recuerdos.

Sin comprender cómo ni por qué, me dejaste marchar, todo te pude dar.

Ya no espero esa explicación que quedó sin dar, esa sinceridad que nos prometimos o ese cariño que me robaste y no me devolviste. Tomaste un nuevo camino, tu camino… y yo decidí entonces tomar el mío.

Estuve al borde del abismo por tu amor.

En un instante, toda una explosión de circunstancias y ni siquiera supiste o quisiste estar ahí. Me dejaste solo ante el peligro, pero la soledad no fue nada comparada con la decepción.

Lejos de tu mar me siento más firme, quédate donde estás.

Pero es cierto que el tiempo todo lo cura. Puede que Cantábrico y Mediterráneo sean dos realidades del Atlántico, pero son dos realidades distintas. Y así es como, poco a poco, vuelvo a ser yo.

 

Soy yo… la que sigue aquí. Soy yo… te lo digo a ti.

He vuelto al lugar de partida momentáneamente. Tú ya no estás aquí.

Mírame y dime qué es lo que ves. Esa mujer que perdiste una vez.

Porque por mucho que hayamos cambiado, el tiempo se paralizó entonces para nosotros. Hay algo que me dice que la esencia permanece pese a todo.

Soy yo… la que se marchó. Soy yo… sin pedir perdón.

Nunca me echaste la culpa por hacerlo y por eso nunca pedí perdón por ello. Lo vivido justifica lo perdido. No me arrepentí y nunca lo haré. A día de hoy creo que, hiciera lo que hiciera, estaba todo perdido.

Mírame y dime cuál es la verdad. Esa será tu sentencia final.

Esa verdad que esperé oír de tu boca, pero que tú decidiste cubrir con un manto de mentiras.

 

Hoy al fin podré disfrutar de lo que es libertad.

Estuve mucho tiempo atado de pies y manos, pero todo eso se acabó.

Creo que llegado el final no hay más que decir, me despido de ti.

No tuve la oportunidad de hacerlo serenamente en su día, por eso creo que te lo mereces.

No me molestes, no me busques, no me encontrarás.

Y si lo haces, que sea porque realmente así lo sientes y lo deseas. No tienes nada que demostrar ni nada por lo que quedar bien.

Lejos de tu mar me siento más cerca de este dulce final.

Un dulce final que ambos nos merecemos.

[…]

Pudiste tenerme…

Ese era mi deseo.

Quisiste perderme…

Esa fue tu voluntad.

Remo lejos de tu tempestad… en calma quedará.

Tu vida era un torbellino que removió caóticamente la mía.

Sin tus velas lo podré lograr… tú no supiste amar.

¿Eres feliz ahora? ¿Has encontrado lo que buscabas? Ojalá así haya sido.

Soy yo… la que sigue aquí. Soy yo… ya te lo advertí.

Te lo dije… El silencio nos haría extraños.

Mírame bien, es la última vez. Soy esa mujer que no podrás tener.

Ni yo soy para ti ni tú eres para mí, pero confío en que nuestros caminos se vuelvan a cruzar pronto y entonces espero la mejor de tus sonrisas. Ese fue el trato, ¿no?

[…]

OFF…

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